La pandemia de COVID-19 puso de relieve la importancia de usar una mascarilla para ayudar a detener la transmisión de los virus respiratorios, incluidos los de la gripe y el VRS. Es una de las medidas de prevención que puede proteger a las personas de infectarse y contagiar a otras. Por ello, las mascarillas siguen siendo obligatorias en hospitales, clínicas y otros centros sanitarios.
Esto es lo que debe saber sobre las mascarillas y cuándo debe usar una:
Conozca su nivel comunitario de COVID-19
Los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) ofrecen orientación sobre el uso de mascarillas y otras medidas de prevención en función del grado de propagación del COVID-19 en su comunidad. Tanto si está vacunado como si no, el uso de una mascarilla sigue siendo importante para ayudar a frenar la propagación en la comunidad. Por ejemplo, cuando el nivel de COVID-19 en su comunidad es alto, los CDC recomiendan al público que lleve una mascarilla de alta calidad.
Conozca su riesgo de enfermar
Algunos grupos de personas corren mayor riesgo de infectarse y enfermar gravemente por COVID-19 y otros virus respiratorios. Los adultos mayores, las personas inmunodeprimidas, las personas con determinadas afecciones subyacentes y las embarazadas se consideran de alto riesgo. Los niños también corren mayor riesgo de infectarse por el VRS y la gripe. La práctica de medidas de prevención como la vacunación y el uso de mascarillas protegerá mejor a estos grupos de la infección.
Sepa qué mascarilla usar
Los CDC explican que la mascarilla más protectora es la que se ajusta bien y es lo bastante cómoda para llevarla constantemente. Sin embargo, hay algunas mascarillas que ofrecen mejor protección que otras.
- Mascarillas de respiración, como las N95, proporcionan el máximo nivel de protección, pero pueden ser más difíciles de tolerar o llevar de forma constante.
- Mascarillas quirúrgicas y KN95s ofrecen una buena protección si se ajustan bien a la cara.
- Mascarillas de tela proporcionan la menor protección, pero sé recomiendan si es la única mascarilla que dispone.
Recuerde que cualquier tipo de mascarilla sigue siendo eficaz para reducir la propagación del virus. Cualquier mascarilla es mejor que ninguna.
Sepa que la ciencia lo respalda
La investigaciones científicas ha demostrado que las mascarillas faciales son una herramienta importante para reducir la propagación del SARS-CoV-2 (COVID-19) y otras infecciones respiratorias. La investigaciones también han descubierto que:
- Las mascarillas impiden que las gotitas respiratorias entren o salgan de la mascarilla, incluso si alguien es asintomático.
- Llevar una mascarilla durante largos periodos de tiempo no afecta a la salud.
- Las mascarillas funcionan mejor cuando se llevan correctamente, cubriendo la nariz y la boca y ajustándose bien a la cara.
- Las mascarillas son más eficaces cuando todo el mundo lleva una.
El riesgo de infectarse con COVID-19 aumenta cuando se quitan las mascarillas. "Si hay una mezcla de personas enmascaradas y desenmascaradas, su riesgo aumenta", dice Emily Spivak, MD, profesora asociada de medicina en la División de Enfermedades Infecciosas de University of Utah Health. "Su riesgo aumenta aún más si no está vacunado".
Sepa que las mascarillas también son seguras para los niños
Los niños a partir de los dos años pueden llevar mascarillas de forma segura. Al igual que en el caso de los adultos, las mascarillas ayudan a proteger a los niños de la infección por virus respiratorios y de su contagio a otras personas. El uso de mascarillas es especialmente importante para los niños con problemas de salud subyacentes.
Existen varios mitos sobre las mascarillas y los niños. No es cierto que llevar una mascarilla dificulte la respiración o que los niños respiren dióxido de carbono cuando llevan mascarillas.
La Academia Americana de Pediatría (AAP) recomienda que los niños lleven una mascarilla facial de alta calidad, bien ajustada y cómoda cuando el nivel comunitario de COVID-19 se considere "alto". Los pediatras de University of Utah Health aconsejan a los padres que busquen mascarillas con varias capas que sean cómodas y se ajusten a la cara del niño. Si hay huecos a los lados, elija un tamaño diferente. Si hay una mascarilla KN95 disponible para su hijo, es la mejor opción.