El síndrome de taquicardia postural ortostática (POTS por sus siglas en inglés) es una enfermedad que afecta a entre 1 y 3 millones de personas en Estados Unidos, entre ellas la nadadora olímpica Katie Ledecky y la cantante Halsey. El POTS es un trastorno crónico caracterizado por mareos y aumento de la frecuencia cardiaca al pasar de estar sentado a estar de pie. Afecta al sistema nervioso autónomo, que controla la presión arterial, la frecuencia cardíaca y la respiración del organismo.
"Cuando las personas tienen frecuentes episodios de mareo asociados con la actividad en posición vertical, deben tratar de ser más conscientes de lo que su ritmo cardíaco es durante esos episodios", dice el doctor Richard Shelton, cardiólogo de la Universidad de Utah Health. "Con el POTS, se produce un aumento de al menos 30 latidos por minuto al pasar de estar tumbado a estar de pie sin que se produzca un descenso significativo de la tensión arterial".
Aquí compartimos cinco cosas importantes que hay que saber sobre el POTS.
1. No es potencialmente mortal, pero puede requerir algunos ajustes.
Si le han diagnosticado POTS, no se preocupe: no es potencialmente mortal y no afecta a su esperanza de vida.
Sin embargo, algunas cosas pueden empeorar los síntomas del POTS. Es importante que conozca sus desencadenantes para que pueda evitar o modificar las situaciones y evitar que empeoren los síntomas desagradables.
Los síntomas del POTS pueden exacerbarse en las siguientes circunstancias:
- Durante o después de una actividad física extenuante
- Durante una enfermedad, como una enfermedad vírica
- Estar de pie durante periodos prolongados
- Cuando hace calor o se toma un baño o una ducha caliente.
- Durante la menstruación o el embarazo
- Después de una operación o lesión grave
También existe una relación entre el POTS y la hipermovilidad. Los pacientes con un trastorno del tejido conjuntivo que causa hipermovilidad, incluido el síndrome de Ehlers-Danlos hipermóvil, pueden desarrollar el POTS sin que existan otras afecciones exacerbantes más comúnmente asociadas a él. Entre ellas se incluyen los virus, las lesiones cerebrales traumáticas o el embarazo.
2. Puede variar mucho en gravedad
Algunas personas diagnosticadas de POTS pueden sufrir mareos ocasionales, pero por lo demás los síntomas son leves. Sin embargo, el POTS puede limitar o incluso debilitar a otras personas.
"Los pacientes con síntomas graves pueden tener que limitar mucho su estilo de vida y sus actividades diarias, hasta el punto de no poder desempeñar un trabajo a tiempo completo que implique estar mucho tiempo de pie o caminando", dice Shelton. "Para los pacientes con POTS muy grave, trabajar es inviable, y muchos de ellos están confinados en sus camas e incluso tienen dificultades para ir al baño".
3. Afecta principalmente a las mujeres
El POTS puede afectar a cualquier persona, pero se observa sobre todo en mujeres en edad reproductiva. El motivo no está claro, pero algunas enfermedades asociadas al POTS también afectan principalmente a las mujeres, como el síndrome de Ehlers-Danlos hipermóvil y las enfermedades autoinmunitarias.
Algunas mujeres manifiestan un aumento de los síntomas del POTS justo antes o durante la menstruación, o durante el embarazo.
"La menstruación provoca una pérdida mensual de volumen sanguíneo, lo que puede aumentar la actividad del sistema nervioso simpático y causar más mareos y taquicardias", dice Shelton.
Algunas notan que sus síntomas mejoran durante el embarazo debido a la expansión de volumen, que es habitual en la gestación. Otras la desarrollan tras un traumatismo importante, generalmente una lesión cerebral traumática, o tras un virus.
4. El diagnóstico puede ser difícil
Muchas personas pasan meses o años antes de recibir un diagnóstico de POTS. Esto se debe en parte a que la amplia gama de síntomas a menudo imitan otras afecciones, como anemia, trastornos tiroideos o deficiencias vitamínicas.
Además de mareos y desmayos, las personas con POTS suelen experimentar lo siguiente:
- Niebla cerebral
- Fatiga
- Falta de aliento
- Palpitaciones
- Dificultad para dormir
- Dolor torácico
- Ansiedad
- Malestar
Si tiene estos síntomas y sospecha que puede tener POTS, su médico puede solicitarle una prueba de mesa basculante, que mide la tensión arterial y la frecuencia cardíaca cuando el cuerpo pasa de la posición tumbada a la posición erguida.
5. No hay cura, pero aún se puede vivir una vida plena
Hay muchas formas de controlar su enfermedad para que pueda seguir llevando una vida plena y normal. Su médico trabajará con usted para elaborar el plan individualizado que mejor se adapte a sus necesidades, pero los siguientes cambios habituales en el estilo de vida pueden reducir los síntomas:
- Haga ejercicio regularmente según su nivel de forma física.
- Beba mucho líquido, siendo el agua la principal fuente de hidratación.
- Aumente el sodio en su dieta. Es posible que su médico le recomiende tomar un comprimido de sodio o un suplemento de electrolitos, sobre todo antes de hacer ejercicio. Elija fuentes de sodio como frutos secos, pepinillos, aceitunas o sardinas en lugar de aperitivos salados como patatas fritas y galletas saladas.
- Siga una dieta cardiosaludable con proteínas, verduras y carbohidratos complejos.
- Haga comidas pequeñas y frecuentes en lugar de dos o tres comidas copiosas.
- Tome los medicamentos que le recete su médico.
El POTS puede ser una enfermedad difícil de sobrellevar y controlar, pero no pierda la esperanza. Controlar el POTS con paciencia y perseverancia junto con su equipo médico puede ayudarle a tomar medidas para recuperar el control sobre su salud.