Incluso en las mejores circunstancias, dar a luz puede ser un reto físico y emocional. Pero para algunas mujeres, la experiencia puede ser tan traumática que afecta a su salud mental y a su capacidad para cuidar de sí mismas y de sus bebés.
"El parto puede ser traumático, tanto si la experiencia es buena como si es mala", dice Qrystel Clages, LCMHC, consejera clínica de salud mental de University of Utah Health. "Pero la reacción de cada mujer será diferente".
¿Qué es el trauma del parto?
No existe una definición única de lo que se considera un parto traumático. "Dos mujeres pueden tener la misma experiencia de parto pero con resultados diferentes", dice Clages. Y hay una amplia gama de experiencias que pueden conducir a un trastorno de estrés postraumático (TEPT). El trauma puede incluir cualquier cosa, desde que el parto no salga cómo uno esperaba (como una cesárea no planificada) hasta el temor de que usted o su bebé no vayan a vivir.
Cómo reconocer el TEPT posparto
"A menudo hay una superposición entre la depresión posparto (DPP) y el trauma posparto", dice Clages. "Si ha tenido un parto traumático, es muy probable que experimente síntomas de DPP". Acudir a los servicios de salud mental materna puede ser muy útil para las mujeres que experimentan estas condiciones.
La gama de síntomas asociados con el DPP o el TEPT posparto es tan variada como las experiencias que conducen a esas condiciones. Si usted o un ser querido ha dado a luz recientemente -independientemente de las circunstancias- esté atento a las señales de trastornos de salud mental.
Los síntomas de la depresión posparto (DPP) pueden incluir:
- ira
- ansiedad
- sentimientos abrumadores
- sentimientos negativos sobre usted misma o sobre su capacidad para cuidar a su hijo
- no comer
- no poder dormir
- pensamientos suicidas (llame a la línea de crisis de SafeUT para obtener ayuda, 833-372-3388)
Los síntomas del TEPT posparto pueden incluir:
- evitar otras personas, lugares o situaciones asociadas con el trauma
- dificultad para dormir
- hipervigilancia
- aumento de la ansiedad o de los ataques de pánico
- revivir el trauma (incluyendo pesadillas y flashbacks)
- empeoramiento de la depresión
¿Quiénes están a un mayor riesgo de padecer TEPT después del parto?
Cualquier trauma real o percibido en el parto puede provocar un TEPT posparto. Este trastorno puede afectar a cualquier mujer que haya dado a luz recientemente. Una mujer que haya sufrido un trauma previo -incluido el abuso sexual- corre un riesgo especialmente alto.
Las experiencias durante el parto que pueden desencadenar el TEPT incluyen:
- que el bebé tenga que ir a la UCIN
- el cordón umbilical enrollado alrededor del cuello del bebé
- sensación de impotencia o falta de control (por ejemplo, ser examinada sin su consentimiento)
- falta de apoyo o tranquilidad durante el parto
- cesárea no planificada
- complicaciones físicas graves del parto, como hemorragias, histerectomía no planificada o desgarros perineales
- uso de ventosas o fórceps durante el parto
Por qué es importante la terapia del trauma del nacimiento
Con demasiada frecuencia, las mujeres sufren en silencio tras un parto traumático. "Pueden sentirse avergonzadas o sentirse fracasadas como madres", dice Clages. "Y a menudo, todo el mundo a su alrededor está tan centrado en el bebé que nadie se para a preguntar cómo está la madre o qué necesita".
Clages insta a las mujeres que sufren depresión, ansiedad o trauma postparto a buscar la ayuda que necesitan. Postpartum Support International ofrece múltiples recursos para las nuevas madres y puede ponerlas en contacto con grupos de apoyo y asesoramiento individual, tanto en línea como en persona.
Puede recuperarse y superar el trauma del parto con el tratamiento y el apoyo adecuado.