Con la llegada del verano, también aumentan las actividades que ponen en contacto a niños y adultos. Nos tiramos a la piscina, vamos a fiestas de pijamas y a parques de atracciones, y nos movemos entre multitudes.
Estas circunstancias nos hacen más susceptibles de contraer infecciones oculares comunes, incluida una afección llamada conjuntivitis o “pink eye” en inglés.
"Los síntomas de la conjuntivitis, incluyen enrojecimiento de los ojos y secreción", dice la doctora Marielle Young, oftalmóloga pediátrica del Centro Oftalmológico John A. Moran. "Los ojos pueden arder, picar o sentirse irritados".
Cada año se registran en EE.UU. unos tres millones de casos de conjuntivitis. Según el Instituto Nacional del Ojo, la conjuntivitis es una de las afecciones oculares más comunes y tratables en niños y adultos.
Esto es lo que Young quiere que sepan los pacientes sobre cómo se propaga la conjuntivitis, cómo prevenirla y cómo tratarla
Tipos de conjuntivitis
La conjuntivitis puede estar causada por un virus, una bacteria o una alergia.
- La conjuntivitis vírica es el tipo más común de conjuntivitis. Está provocada por el mismo virus que causa la secreción nasal y el dolor de garganta en las personas con resfriado común, y es muy contagiosa. Puede causar ardor y enrojecimiento de los ojos con secreción acuosa.
- La conjuntivitis bacteriana, causada por una infección bacteriana, también es muy contagiosa. Provoca ojos doloridos, rojos y pegajosos.
- La conjuntivitis alérgica no es contagiosa. Se debe a una reacción alérgica al polen, el humo, el cloro de la piscina, los animales u otros elementos ambientales. Puede provocar picor, enrojecimiento y lagrimeo de los ojos, así como hinchazón de los párpados.
Los niños son los más propensos a contraer conjuntivitis vírica o bacteriana. Esto se debe a que están en estrecho contacto con otras personas, como en guarderías y parques infantiles, y no suelen tener buenas prácticas de higiene.
La conjuntivitis contagiosa suele propagarse a través del contacto directo con los fluidos corporales de una persona infectada, normalmente a través del contacto entre las manos y los ojos.
Prevenir la propagación de la conjuntivitis
A continuación se indican algunas medidas que los padres pueden adoptar para ayudar a prevenir el contagio de la conjuntivitis entre los niños:
- Anime a los niños a lavarse las manos con agua y jabón a lo largo del día.
- No deje que se toquen ni se froten los ojos.
- No compartan nada que toque los ojos, incluyendo los lentes y mascarillas (médicas y de disfraces).
- Asegúrese de que utilizan su propia toalla, manta y funda de almohada.
- Lave las secreciones del contorno de los ojos varias veces al día.
Además de los consejos anteriores, los adultos pueden limitar la propagación de la conjuntivitis vírica y bacteriana entre ellos y sus familias siguiendo estas medidas:
- Lávese las manos inmediatamente después de tocar los ojos, la ropa blanca o la ropa de una persona infectada. Si no dispone de agua y jabón, utilice un desinfectante de manos a base de alcohol que contenga al menos un 60% de alcohol.
- No utilice el mismo dispensador o frasco de gotas para los ojos infectados y no infectados, ni siquiera con la misma persona.
- Limpie regularmente los lentes y lentes de sol.
- Limpie, guarde y cambie los lentes de contacto siguiendo las instrucciones de su oculista.
- No comparta maquillaje, pinceles de maquillaje, lentes de contacto, envases ni lentes.
Cuándo acudir al médico
La conjuntivitis suele desaparecer por sí sola, pero puede reducir los síntomas colocando una toallita húmeda y caliente sobre los ojos durante unos minutos. Repítalo varias veces al día y utilice una toallita limpia cada vez.
Sin embargo, acuda al médico inmediatamente si una persona experimenta estos síntomas:
- Cambio de visión
- Molestias importantes
- Aumento del enrojecimiento o secreción
- Hinchazón de los párpados
- Fiebre
¿Conexión entre la conjuntivitis y COVID-19?
Es posible que haya oído que existe una conexión entre el COVID-19 y la conjuntivitis, pero la Academia Americana de Oftalmología señala que, si bien el virus puede causar conjuntivitis en casos poco frecuentes (los expertos creen que se desarrolla en sólo el 1-3% de las personas con la enfermedad), no parece ser un síntoma independiente del COVID-19. Así pues, que alguien tenga conjuntivitis no significa que esté infectado por coronavirus.