¿Se queda dormido en su escritorio pero se encuentra totalmente despierto en mitad de la noche? La pérdida crónica de sueño puede tener efectos negativos a corto y largo plazo sobre la salud, como depresión, obesidad, disminución de la función del sistema inmunitario y enfermedades más graves, como hipertensión, diabetes y cardiopatías. He aquí cinco consejos que le ayudarán a conseguir un sueño de calidad para que pueda vivir su mejor vida.
Dedique tiempo a dormir
El sueño es uno de los pilares de la salud, junto con la dieta y el ejercicio. Reserva ocho horas para dormir igual que lo haría para trabajar, comer o hacer ejercicio.
Sea coherente
Una rutina relajante cada noche ayuda al cerebro a producir melatonina, una hormona asociada al sueño. Intente atenuar las luces, leer un libro o tomar una taza de té caliente. Igual de importante es una hora constante de levantarse cada mañana. Y sí, también los fines de semana.
Olvídese de las pantallas
Puede ser tentador ver la televisión o navegar por TikTok antes de acostarse, pero la luz emitida por las pantallas suprime la producción de melatonina. Apague las pantallas una o dos horas antes de acostarse y lea un libro.
Limite su consumo de cafeína y alcohol
Intenta limitar su consumo de cafeína a una o dos raciones al día, y no tome nada pasado el mediodía. La cafeína es un estimulante y puede tardar horas en desaparecer. Aunque el alcohol puede hacer que se sienta relajado y somnoliento, tiene un impacto negativo en la calidad y duración del sueño.
Sea activo
La actividad física regular puede ayudarle a descansar mejor por la noche e incluso a aliviar los problemas relacionados con el sueño. Sin embargo, evite hacer ejercicio demasiado cerca de la hora de acostarse, o podría acabar con demasiada energía para conciliar el sueño.