Sabemos que la radiación ultravioleta (UV) puede provocar quemaduras solares que nos exponen al riesgo de padecer cáncer de piel, pero ¿sabía que sus ojos también pueden sufrir quemaduras solares?
"Fotoqueratitis es el término para los ojos quemados por el sol, y ocurre cuando la exposición intensa al sol durante muchas horas daña las capas externas de las células de la córnea", explica la oftalmóloga del Centro Oftalmológico John A. Moran, la doctora Nishika M. Reddy. "Cuando esas células mueren y se desprenden, es doloroso. Sus ojos se hinchan y lagrimean mucho, y puede tener visión borrosa. También es probable que sea más sensible a la luz".
Reddy aconseja acudir inmediatamente al oftalmólogo si se experimenta alguno de estos síntomas después de exponerse al sol. Si los ojos se infectan, la córnea puede cicatrizar y volverse opaca, afectando permanentemente a la vista.
Si evita la infección, la fotoqueratitis suele desaparecer por sí sola en unos días. La mala noticia: la exposición excesiva al sol sin protección puede acelerar la aparición de cataratas (opacidad del cristalino) y cáncer de ojo o de párpado.
Además de las quemaduras solares, los crecimientos en la capa externa del ojo, como el pterigión, pueden aparecer en la adolescencia o a los 20 años. Los esquiadores, pescadores, agricultores y otras personas que pasan horas bajo el sol del mediodía o cerca de ríos, océanos y montañas corren un riesgo mayor.
Consejos para evitar quemaduras solares en los ojos:
- Asegúrese de que los lentes de sol ofrecen una protección 100% UV o UV 400 y no se las quite mientras esté al sol. Esto se aplica también a los niños de todas las edades.
- Use lentes de sol envolventes que le protejan de los rayos UV que vienen de los lados. También protegen los ojos del viento, que contribuye a la sequedad ocular.
- Evite la luz solar cuando sea más intensa: a mediodía o a primera hora de la tarde, a mayor altitud y cuando se refleje en el agua, el hielo o la nieve.
- Lleve un sombrero de ala ancha con sus lentes de sol.
- Sepa que las nubes no bloquean la luz UV. Los rayos dañinos del sol pueden atravesar la bruma y las nubes.
- Asegúrese de utilizar FPS en la cara, ya que la piel que rodea los párpados es la más fina del cuerpo.
- Nunca mire directamente al sol.