En Estados Unidos, unos 6,2 millones de adultos han sido diagnosticados de insuficiencia cardíaca, según los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC por sus siglas en inglés). La insuficiencia cardíaca es una enfermedad crónica, y aprender a vivir con ella, o a cuidar a alguien que la padece, puede ser un reto de adaptación.
Aquí compartimos 10 cosas que debe saber sobre la insuficiencia cardíaca que le ayudarán a comprender su enfermedad para que pueda controlar sus síntomas y llevar una vida plena.
1. Insuficiencia cardíaca no significa paro cardíaco
El diagnóstico de insuficiencia cardíaca es alarmante, pero no significa que el corazón haya dejado de funcionar por completo. Significa que la capacidad del corazón para bombear sangre con eficacia se ha visto comprometida, lo que puede hacer que otras partes del cuerpo no reciban suficiente oxígeno.
"Lo primero que le digo a los pacientes con este diagnóstico es que tiene un nombre horrible", dice Kevin Shah, MD, cardiólogo de la University of Utah Health. "Es un nombre espantoso para una enfermedad en la que, en términos generales, el corazón no lleva suficiente sangre al organismo. Pero yo les recuerdo que hay muchos tratamientos y medicamentos disponibles para ayudar a restablecer esa función cardíaca."
2. Existen diferentes tipos de insuficiencia cardíaca
Saber qué tipo de insuficiencia cardíaca padece y comentarlo con su médico puede ayudarle a conocer el mejor tratamiento y control.
Los tipos más frecuentes de insuficiencia cardíaca son:
- Insuficiencia cardíaca con fracción de eyección reducida, o insuficiencia cardíaca sistólica: El músculo cardíaco está débil y dilatado y su función de bombeo está alterada. Es un tipo de insuficiencia izquierda.
- Insuficiencia cardíaca con fracción de eyección conservada o insuficiencia cardíaca diastólica: El músculo cardíaco está rígido y no puede relajarse normalmente entre latidos. Es un tipo de insuficiencia izquierda.
- Insuficiencia cardíaca derecha: El ventrículo derecho del corazón es demasiado débil para bombear sangre con eficacia. Suele ser consecuencia de una insuficiencia izquierda.
3. Conocer los síntomas es importante
Reconocer los signos y síntomas de la insuficiencia cardíaca es crucial para una intervención precoz.
Entre los síntomas habituales de la insuficiencia cardíaca se incluyen:
- Fatiga o debilidad
- Dificultad para respirar, sobre todo al tumbarse
- Hinchazón de pies, tobillos, pantorrillas o abdomen (edema)
- Latidos cardíacos rápidos o irregulares
- Tos o sibilancias persistentes
- Pérdida de apetito o náuseas
- Cambios de peso
"Conocer sus capacidades físicas actuales y ver un cambio significativo en ellas puede ser preocupante", dice Shah. "Si alguien solía ser capaz de caminar alrededor de la cuadra sin quedarse sin aliento, pero ahora va a mitad de camino y necesita tomar un descanso, eso puede ser una pista de que hay un factor de riesgo o potencialmente insuficiencia cardíaca."
4. Las causas de la insuficiencia cardíaca varían
Una amplia gama de factores puede conducir al desarrollo de insuficiencia cardíaca, incluyendo riesgos como el tabaquismo, el abuso del alcohol, la obesidad y algunos tipos de tratamientos contra el cáncer. Otras comorbilidades son:
- Enfermedad arterial coronaria (la causa más frecuente en EE.UU.)
- Hipertensión (tensión arterial alta)
- Infarto de miocardio
- Diabetes de tipo 2
- Infecciones víricas
- Ritmo cardiaco anormal (arritmia)
- Cardiopatías congénitas (presentes al nacer) y otras predisposiciones genéticas
5. No hay cura, pero sí tratamientos
La insuficiencia cardíaca es una enfermedad crónica, pero puede tomar medicamentos para controlar los síntomas, mejorar la función cardíaca y reducir el riesgo de complicaciones. Estos medicamentos incluyen diuréticos, betabloqueantes, inhibidores de la ECA y fármacos que ayudan a reducir el colesterol.
En casos graves, puede ser necesario un marcapasos, un DAI o un trasplante de corazón.
6. Los cambios en el estilo de vida son cruciales
Adoptar cambios de estilo de vida cardiosaludables puede ayudarle a controlar los síntomas y mejorar su calidad de vida. Siga una dieta baja en sodio y grasas saturadas. Evite el tabaco, las drogas y el alcohol en exceso. También es importante mantenerse físicamente activo de forma segura.
"A algunas personas les preocupa no hacer más ejercicio porque su corazón ya no bombea tanta sangre, pero en realidad queremos que la gente se mantenga lo más físicamente activa posible", dice Shah. "Trabajar con su médico o un programa de rehabilitación cardíaca para desarrollar un plan de ejercicios con el que se sienta cómodo y seguro es una parte realmente importante."
7. Deberá seguir una dieta baja en sodio
Seguir cuidadosamente una dieta baja en sodio es muy importante para la salud de tu corazón. Deshágase del salero y encuentre recetas bajas en sodio para aprender a condimentar los alimentos sin sal. Lea todas las etiquetas de los alimentos y sepa identificar los ingredientes con alto contenido en sodio. Es posible que su médico le indique un objetivo de sodio que debe cumplir cada día, así que lleve un registro de lo que come para asegurarse de que no sobrepasa su límite diario.
8. Es posible que tenga que limitar la ingesta de líquidos
Algunos pacientes con insuficiencia cardíaca necesitan restringir la cantidad de líquidos que consumen para evitar la acumulación de líquidos. Su médico puede no recomendar esto a todos los pacientes, así que asegúrese de seguir el plan de tratamiento específico de su equipo médico.
9. La insuficiencia cardíaca puede afectar a cualquiera
Aunque las personas con determinados factores de riesgo tienen más probabilidades de desarrollar insuficiencia cardíaca, ésta puede afectar también a personas jóvenes y sanas. Algunas personas también pueden nacer con una cardiopatía. Además, las enfermedades víricas que debilitan el corazón pueden provocar insuficiencia cardíaca. También existe una enfermedad poco frecuente llamada miocardiopatía postparto, en la que la insuficiencia cardíaca se desarrolla durante el último mes de embarazo o poco después del parto.
10. Hay esperanza
El diagnóstico de insuficiencia cardíaca puede parecer una sentencia de muerte, pero es absolutamente posible llevar una vida satisfactoria con esta enfermedad. Seguir los consejos del médico sobre el tratamiento y controlar adecuadamente los síntomas le pondrá en el buen camino para vivir bien con su diagnóstico.
"Para la mayoría de los pacientes, se trata de una enfermedad crónica que puede tratarse", afirma Shah. "La función cardiaca puede restablecerse con las intervenciones adecuadas, y la clave está en asociarse con un gran equipo que le apoye durante todo el proceso".